Atizando la ciudad

Atrás quedaron las épocas de parranda en las que el mellito tocaba el acordeón y el alcalde hacia las veces de cantante en "antique y piqué" o en cualquier parranda vallenata donde se encontraran. Bonitos tiempos aquellos en los que el mello entonaba y el acalde ponía la voz en las flacas están de moda.

Esta vez la discusión corrió por cuenta de los trinos del gobernador oponiéndose a la demolición del viejo Eduardo Santos, y siendo claro no me opongo a que lo hagan nuevo si es lo que quieren los seguidores del alcalde, la verdad es una buena decisión, siempre y cuando lo hagan en el mismo sitio que esta el actual estadio o mejor dicho, siempre y cuando lo hagan, porque esta administración se ha caracterizado por decir que tiene planes maestro para todo, pero en ejecución pocon pocon, hasta el punto de dejar perder los recursos que no gestiona el alcalde.
La semana pasada comenzó caliente cuando el mello en declaraciones que llamare un poco desatinadas salio a decir que el estadio no se debía demoler, y que era mejor repararlo, en verdad que eso no es lo mejor para la ciudad, la ciudad necesita un estadio de talla mundial, con normas FIFA, y que permita llevar partidos internacionales en la cuna del fútbol colombiano. El mello en su afán de conseguir votos y de ahondar en la polarización que se vive por estos días en la ciudad de bastidas salio con las frases que realmente no le quedan nada bien a quien tuvo el control del estadio durante dos años y no hizo nada por darle mejor vida al viejo Eduardo Santos, ese estadio que vio coronar al Unión Magdalena por allá en el año 1968 en un vibrante partido contado por mi padre que no termino en lo reglamentario por el gol del empate conseguido por Ramón Rodriguez y que ocasiono que toda la tribuna del viejo Gorrion invadiera la cancha.

De aquel estadio a lo que hoy propone el alcalde con una arena de eventos, nombre al mejor estilo europeo para una ciudad que cuenta con un servicio de transporte digno de Macondo son las contradicciones que produce esta administración, pero sobre todo produce muchos Tweets de los amigos, de ese ejercito bien comandado por quien adoctrino a varios de esos alfiles hace algunos años en la Universidad y que hoy lo acompañan, no tan des interesadamente como lo quieren hacer creer, porque les toca asegurar la bolsa de pan del desayuno con un Tweet acertado que logre convencer al alcalde de que están con el, porque sino no están en su administración cosa que ya les paso a algunos.

Se aviva el fuego en una ciudad que sigue en el pasado, y en la que los años no pasan, así muchos quieran mostrar cosas este año de elecciones para seguir teniendo "la tetica" agarrada y chupando de lo lindo, se encargan de atizar el carbón, haciendo TT en el Twitter lo que se ordena desde la alcaldía, pero sobre todo mostrando a nivel nacional lo que los medios locales no hacen, en parte por el sesgo y las contradicciones en las que vivimos, pero sobre todo porque vale mas un Tweet que una obra en estos tiempos, en la que muchos dicen que ya no se debe recordar por el cemento sino por los que se diga en las redes sociales. Solo espero que Dios ilumine a la ciudad dos veces santa y que no sigamos en este ambiente polarizado en la que se avivan los odios y amores de los que andan por la carrera 5ta de a pie.



Perlas:

• El senador antes presidente sigue de gira y no es musical, sigue dando que hablar ante la comunidad internacional, haciendo lo que le criticaba a Petro y a Piedad. Son las cosas bonitas de la política colombiana que es bastante movidita y cambiante.