martes, noviembre 28, 2017

El país de los poderosos

No es ser ni parecer, es demostrarlo. Así con esa sencilla frase se resume lo que en derecho o en justicia actúa en nuestra querida y amada Colombia. Un país en donde enfrentar a los poderosos se convierte en una lápida o en una sentencia judicial en contra, siempre ha sido el poder una enfermedad que corrompe al ser humano.
Como entender que sobre la mesa existan tantas denuncias de contratos y nominas paralelas en administraciones públicas, y en entes de control como la Contraloría de Bogotá o el fiscal anticorrupción de la Fiscalía General, y estas no surtan los tramites de forma rápida como si lo hacen cuando se levantan las voces que claman desde lo popular el poder que tanto se anhela por quienes parecen enfermos de esta cruel epidemia que enferma los políticos de Colombia.

Que ha pasado con las interceptaciones al Hacker de Zuluaga y las acusaciones contra su hijo David Zuluaga quien se encuentra en los Estados Unidos, o que decir de tantas investigaciones que cursan en contra de Álvaro Uribe, por no mencionar los torcidos que se hicieron en las pasadas elecciones presidenciales en las que se movía dinero, mencionado esto por Armando Benedetti, quien solo al verse acorralado por quien antes fungía de su amigo y ahora es su enemigo político, decidió hablar y decir lo que paso en la costa con los dineros calientes para mover la votación por el hoy presidente de la república. O que ha pasado con el amigo del presidente Roberto Prieto quien con todo en su contra en las investigaciones y pesquisas que se realizan en los diferentes casos de corrupción sigue tan campante como si nada, seguro el día que sea un palo en la rueda para la fiscalía de German, en ese momento se tomaran las decisiones.
Quien de Cambio Radical responde por Kiko Gomez, Oneida o por la gobernación del mello cotes cuando contra viento y marea decidió adjudicar la vía de la prosperidad sabiendo de acuerdo a los conceptos de la procuraduria y el ministerio de Transporte que esta no se iba a terminar y que existían serios reparos a la forma en que se estructuro dicho proyecto.

Pero no nos parece nada cruel que algunos políticos poderosos, bandidos estén cobrando mediante sus amigos de contratos la polémica suma de 40 mil pesos por una libra de pechuga que no se ve en la alimentación de los niños, ya en investigaciones aparecen los nombres de gobernadores del partido con más implicados en casos de corrupción en Colombia, y a quienes la justicia cada vez que se les nombra hace que se retracten quienes lo menciona. O que tal los miles de millones de pesos que se han gastados en dos administraciones departamentales del Magdalena para la solución de la erosión en el kilómetro 19 en la vía Barranquilla - Ciénaga y de esto nadie responde ante la vista gorda que se hacen quienes ven como el mar se sigue tragando la carretera día a día. 

Cuando empezaran las capturas contra aquellos que han saqueado el departamento del Magdalena durante muchos años, o aquellos que acabaron con presupuestos onerosos en la ciudad de Bastidas? Cuando iniciaran las capturas contra los responsables de corrupción y mala alimentación de los niños? Son preguntas sin respuestas, en un país manejado por los mismos con las mismas, y que ahora usan títeres para seguir perpetuados en el poder. Como se nota la parcialidad en los manejos de un país que ahora es dominado políticamente por German Vargas y su partido, con tanto poder que hasta domina la Fiscalía, el órgano de investigaciones en donde el que le caiga mal, tendrá su investigación.

Arremeten los poderosos en el país de los Santos, Vargas y Uribe, los mismos con las mismas y el día que los derrotan salen a mentir al país, así vivimos y así somos, somos Colombia.

Cuando la justicia no es a su medida

 Este país y en general el mundo entero está acostumbrado a la victimización de quienes en el poder acuden a toda clase de mañas para manten...