miércoles, enero 24, 2024

Una refoma para otra reforma

 Desde que Gustavo Petro asumió la presidencia de la república, se colocó el reto de cambiar el país. Fue oposición toda su vida, y mientras lo fue, tenía la solución a todos los problemas que aquejaban al país, tanto fue que criticaba todas las acciones del gobierno de turno, las tributarias de Duque, la que le costó la cabeza a Carrasquilla cuando el país se levantó en una protesta social, porque el entonces ministro no sabía cuánto costaba un cartón de huevos, cartón de huevos que con Petro tuvo un incremento exponencial jamás antes visto y que parece estar cediendo en su precio.

Petro, conformó un equipo técnico como siempre inicia sus administraciones, así fue cuando estuvo de alcalde de Bogotá, pero luego, se atrinchero en la izquierda más radical, en el ala de su confianza con personajes que son más activistas que estadistas, más zalameros que técnicos y más resentidos que unificadores de un país dividido. En esa orilla encontramos a la exministra Carolina Corcho, quien tuvo la tarea de impulsar la primera reforma que Petro soñó, reformar el sistema de salud del país, llevarlo a un nivel en el que el estado sea el responsable y no las EPS, las cuales según Petro son las culpables del desorden y el mal sistema para Petro y sus Petristas que Colombia tiene. 

Sin embargo, la señora Corcho nunca pudo tener una reforma que unificara conceptos, fue muy criticada por todas las organizaciones médicas del país y claro, por las EPS, que veían en la reforma como el estado pasaba a tomar el control del sistema y se inventaban una cantidad de actores y mecanismos para llevar el modelo a una salud preventiva y no correctiva. Eso en términos coloquiales suena bonito, lo difícil es su implementación y costo. Sin mencionar, que los dineros se manejaran por gobiernos locales y por el ADRESS.

Muchos hemos advertido que este modelo propuesto en la reforma a la salud es inviable financieramente.  Por eso, el hoy ministro de la salud es capaz de hablar de una nueva reforma tributaria sin despeinarse, esos mismos activistas que criticaban las acciones de Duque y los gobiernos anteriores hoy se comportan de la misma forma para garantizar sus ideales e intereses. El ministro Jaramillo quien reemplazó a la señora Corcho, es más ala dura del petrismo, un poco más terco, pero con mayor bagaje político, lo que le permitió al gobierno pasar la reforma con la ayuda de los partidos políticos tradicionales por la Cámara de representantes.

 Hoy, los que criticaban como los políticos del momento clavaban al ciudadano de a pie hacen lo mismo, no les interesa la clase media, velan siempre por sus intereses y ellos van de la mano de tener a muchos subsidiados, eso incluye a los famosos jóvenes en acciones con el millón de pesos para no delinquir, son tan falsos o peores que los de antes. Una reforma para otra reforma es quizás el camino que le queda a Petro para financiar su famosa y fallida hasta ahora reforma a la salud, esa con la que sueñan políticos locales para frotarse las manos viendo como manejan tajadas y votos con tal de ser los nuevos ricos y seguir atornillados en el poder por más tiempo.

 


viernes, enero 19, 2024

Un Bukele en Colombia

Cada día que pasa, sigue tomando fuerza la idea de que en Colombia aparezca un personaje como Nayib Bukele para presidente. Si Duque logró que Petro fuera el primer presidente de izquierda en Colombia, lo que está logrando Petro es que se monte una figura del talante de Bukele. La gente del común no entiende el peligro de este tipo de personajes que son capaces de pasar por encima de los derechos humanos y todo porque se requiere mano fuerte. La política del castigo funciona y prevalece en dictaduras, así como cuando Pinochet fue presidente en Chile, el resultado final ya lo conocemos.

Petro durante su vida como opositor criticaba al gobierno derrochón, criticaba los viajes de Duque a Panaca con sus hijos, criticaba que el entonces presidente no fuera al Choco a atender las emergencias en su momento. Sin embargo, no es llegar al poder y hacer lo mismo que hacían los de antes. Así funciona el mundo político, Petro sabe jugarlo y con mayor soberbia, con tal prepotencia y egocentrismo que es capaz de pelear por redes sociales con periodistas o con cualquier ciudadano del común.

La situación del país es de total inseguridad en las calles, las políticas de Petro de regalar dinero a los jóvenes por no delinquir es copia de un modelo fracasado en otros países como el Ecuador, en donde la ola de violencia que viven pone sobre la mesa y en alerta a los países de Latinoamérica. Colombia vive una ola de extorsiones y secuestros como en las épocas de Pastrana y todo eso conlleva a que muchos piensen que se necesita verdadera mano dura contra el hampa, es ahí donde aparecen personajes como Bukele, que venden la idea de la seguridad a todo costo, así como lo hizo Uribe en épocas de Pastrana en el año 2002.

Un Bukele para Colombia, un personaje que muchos quisieran encarnar. El país debe conocer que no es lo mismo ser presidente de un país como El salvador, que tiene el tamaño del departamento del Valle del cauca fácilmente gestionado por un gobernador de departamento. No es comparable bajo ningún criterio. Los malos gobiernos por lo general llevan a uno peor, es lo que vivimos con Petro luego del desgobierno de Duque, este el de Petro, ha sido un gobierno derrochón, burocrático, lleno de funcionarios activistas que siempre hablan desde la orilla que los convoca y no desde la óptica de país.

El panorama está claro, la derecha busca su Bukele para competirle al que elijan en la izquierda, en donde hay un ramillete de personas bajo la misma sabana ideológica y muchos cuestionados como Quintero, Caicedo o la exministra Corcho. El próximo Bukele que esperan será un personaje que se enfrente con todo a Petro, en esa carrera puntea la senadora Cabal, quien es refutada por Petro todos los días en las redes sociales. El que pierde en todo esto es Colombia. Necesitamos gente decente, no extremistas, no necesitamos un Bukele, un Milei ni mucho menos un Chávez o un Petro. 

 


domingo, enero 14, 2024

Bloqueados

Viajar de Barranquilla a Santa Marta se ha vuelto una lotería que nadie se quiere ganar, una lotería para llegar a tiempo o que le toque un bloqueo de cualquier ciudadano que sienta que sus derechos se están vulnerando, puede ser porque no tengan luz, no tengan agua, puede ser porque sientan que los servicios son malos, aunque tengan agua y luz o simplemente pueden protestar porque el país va mal y ellos piensan que puede ir mejor. 

Durante el 2023 se presentaron más de 60 bloqueos en la mencionada vía, 60 fechas ganadores para más de 3 mil o 4 mil vehículos que han quedado bloqueados porque a la gente le parece que la forma de protestar y hacer valer sus derechos es joderle el viaje a los que deben ir de Santa Marta a Barranquilla o viceversa. Todo con el aval de los gobiernos del cambio, secundado obviamente por el gobierno nacional y su política de dialogo antes que la confrontación para despejar las vías, por parte del desaparecido Esmad, el que tanto Petro prometió acabar para que los bandidos salgan a protestar cada vez que les dé la gana.

El problema no es nuevo, Tasajera es un pueblo fallido, es de esos lugares donde sus habitantes crecen con un resentimiento social por el abandono estatal, creen que deben tener mejores condiciones de las que tienen y por eso no pagan luz, tienen subsidios elevados, y cuando se les daña un transformador el cual la empresa de energía no les arregla, salen a bloquear, cuando no les llega el agua que no pagan, salen a bloquear y cuando se voltea un camión salen a robar, triste y duro decirlo pero es una realidad que día a día se ve en la carretera que comunica a Santa Marta con Barranquilla.

Un problema social que no han podido solucionar gobiernos anteriores, ni gobiernos nuevos. No han dado con la tecla los gobiernos de derecha ni los gobiernos de izquierda. En elecciones se vieron muchas camionetas con camisetas naranjas buscando votos, en Pueblo viejo barrió el gobernador Rafael Martínez, como lo hizo en todo el departamento. Ahí barrieron en su momento los cotes, y la carretera sigue a merced de estas personas que se han hecho magister en bloquear las vías.  Nacer y crecer en esa zona es muy parecido a nacer en palestina, condenados....

Mas del 90% de los cierres en esta vía se presentaron por ausencia de servicios públicos siendo el común denominador en esta situación; los agentes de policía son insuficientes para trasladarse en las diferentes zonas.  En junio de 2023, se registraron incidentes de robos realizados por individuos inescrupulosos, específicamente en Tasajera. Y aunque las autoridades han realizado acciones internas a cargo de la Policía Metropolitana de Santa Marta, involucrando diversas especialidades el problema persiste. Solo es que un camión se voltee para que lleguen los saqueadores profesionales a hacerse con la mercancía, o en el caso de los carnavales que se toman la vía con retenes ilegales parando carros pidiendo plata, lo que hacen ver como parte de su cultura de bloquear.

La competitividad del departamento se ve realmente afectada ante tanto bloqueo, la comunicación de las ciudades queda a merced de que en estos puntos de la carretera no amanezcan con ganas de cerrar, porque luego de pagar dos peajes bien caros, se queda a la de Dios y a las ganas de que no bloqueen la vía los profesionales de Tasajera y de estos sectores que son amos y señores de la carretera que para desgracia de la mayoría quedo en medio de sus territorios.

 


viernes, enero 05, 2024

Mezquinos e incompetentes

 La política es tan dinámica como podrida, la mayoría de las veces priman los intereses políticos sobre los intereses de la ciudadanía, eso quizás pasa en todo el mundo, y ahora está pasando en Colombia. A Barranquilla le costó mucho ganar ser la sede de los juegos panamericanos del año 2027, sin embargo, eso no le importó al actual presidente cuando llegó al poder para decir que los juegos eran muy costosos para un país pobre y con tanta miseria como el nuestro. Ese fue el primer argumento para un emperador como Petro, que no veía con buenos ojos que justo la capital que gobiernan sus enemigos políticos tuviera el brillo y sea la ciudad ejemplo de Colombia.

Los seguidores más fieles de Petro acompañaron la frase del presidente, cuando dicen que es mejor invertir el dinero en otras cosas, que los juegos panamericanos son realmente muy costosos y que Colombia no tiene plata, eso repiten como loros un tal Alejandro Ocampo, una muchacha llamada Mafe Carrascal, quienes llegaron al congreso de la mano de las listas cerradas de Petro, esas en las que se montan los más fieles seguidores y uno que otro colado como el senador Paulino Riascos. 

Ganar la sede de los panamericanos no fue una tarea fácil, en 50 años Colombia lo había intentado en dos ocasiones anteriores con el resultado adverso, los panamericanos son en materia deportiva después de los Olímpicos los juegos más importantes del mundo, congregan más de 40 países de todo el continente.  La organización había puesto sus esperanzas en la capital del Atlántico al declararla sede a través del mecanismo de aclamación, la confianza puesta en manos de la ciudad no pudo contener la fatídica decisión del presidente de Panam Sports de retirar la sede a la capital del caribe.

La mezquindad de este gobierno se resume en quitarle el brillo y protagonismo a  la ciudad que se ganó el derecho a ser sede, al llegar a la presidencia Petro, lo primero que hizo fue hablar de que los panamericanos debían ser de la región caribe, algo que unilateralmente no se puede, ahí comenzó la desconfianza de la organización de los juegos, la ciudad por derecho propio se ganó la sede y un presidente enemigo político de quienes dirigen la ciudad quiso quitarle el espectáculo solo porque le parecía que era mejor decir juegos panamericanos del caribe en Colombia. Las subsedes se definen por características propias y necesidades, no por gustos o caprichos mezquinos de un presidente.

La incompetencia de una ministra de deportes, que poco ha hecho por el deporte del país, se ve reflejada en la incapacidad de gestionar a tiempo los pagos a los que la nación se comprometió en reuniones previas, y claro que tiene responsabilidad el mismo Iván Duque, otro mezquino político al igual que Petro, la división y polarización del país se ve reflejada en los resultados que se obtienen, y perder los Panamericanos es fruto de ellos. Los mezquinos e incompetentes funcionarios que dirigen el país dan sus frutos, y los vemos en el gobierno nacional y en gobiernos locales, así se pierde el dinero que la nación puede girar a entes territoriales, todo porque no tienen la bendición de un pequeño emperadorcito.

Queda una luz de esperanza o eso nos dicen ahora, y es que en la próxima asamblea de Panam Sports se pueda reversar la decisión que tomo su presidente. Quizás si eso ocurre, la mezquindad de Petro le dará para decir que el recuperó unos juegos perdidos por su incompetencia. Este es el país del sagrado corazón que no tiene cura ni remedio mientras estén en el poder personas así. Ni los de antes ni los de ahora en mi opinión. Pero alguien debe responder por esta vergüenza mundial, solo comparada con perder el mundial del 86.

Perlas:

  • El gabinete de Pinedo en Santa Marta quedó técnico con gente muy de antes, muy con los politicos de siempre, esos que tanto critican las fuerza naranjas, Esperemos a ver que hayan aprendido la lección de trabajar por la ciudad y no por sus intereses.
  • Me gustó mucho la respuesta de Pinedo a las declaraciones del gobernador Rafael Martinez, un discurso de Martinez muy desde el odio y la salameria que lo caracteriza. Pinedo le dejó en un post de la red X, quien es Martinez para la ciudad. Y muchos estamos de acuerdo con la definición que le dío Pinedo. Aca el post: https://twitter.com/CarlosPinedoC/status/1741985701799829626



La ciudad mal educada

Hace unas semanas se publicó un informe que mide en las principales ciudades de Colombia la percepción de mala educación de las personas que...