sábado, diciembre 20, 2014

El filosofo del vallenato

Hace tiempo quería escribir unas notas, y perdonen si resulto extenso, de quien considero y se dice es el mas grande expositor del vallenato, quien con sus locuras, irreverencia, música y carisma marco un antes y un después en el mundo del vallenato, quien hace un año partió de este mundo, tal vez muy temprano, victima de sus excesos y malas compañías.
Sin embargo el gran Diomedes merece todos los aplausos y el respeto musical, ejemplo de artista quizás no de persona por todo lo que vivió. Pero mas allá de eso, hoy quiero rendir un homenaje al artista, a ese interprete que hace que se sienta la canción como una melodía integra y sentida en un solo tono.
Quizás, de eso que llamaban la locura cuando Juancho Rois y Diomedes se unieron, bautizaron para la historia ese trabajo con un nombre sonoro y de mucha recordación.  Y en cosas del artista la gente es la que manda, como mandado a hacer Roberto Calderon compuso otra gran canción en la cual el folclor ganó mucho, volvía la locura y eran mas conscientes, Diomedes todavía muchacho disfrutaba las mieles del éxito, esas que siguió acariciando con el gran colacho mendoza.
Su vida musical estuvo marcada por el amor al folclor, a lo simple, a la gente, siempre sin descuidar su fanaticada, Grabó con Nafer Duran, Elberto Lopez, Juancho Rois, Colacho Mendoza, Cocha Molina, Ivan Zuleta, Franco Arguelles, Juancho de la Espriella, Alvarito Lopez y Rolando Ochoa, todos grandes acordeoneros, algunos hechos por el.

El Cocha, un muchacho que Diomedes conoció en Patillal, a quien bautizo el pollo en la canción del gallo y el pollo, eso que decía que si Diomedes lo cargaba podían apostar la plata que quieran, Diomedes lo respaldaba con su canto, anticipaba lo grande que iba a ser el cocha cuando fuera un rey vallenato que todos tenían que respetar, a excepción de calixto, de alejo duran, emilianito y colacho y tambien alvarito lopez,  que después de estos acordeoneros quedara el luquismo dando vironga.

Nunca podre olvidar lo que despertaba Diomedes en la gente, seria el año 1997 cuando por primera vez lo vi en un KZ, allá en el club del terminal en Santa Marta y verlo entrar medio borracho, medio en otro viaje, y al montarse en la tarima cambiaba toda esa mala impresión por locura, por folclor.

Quien como el filosofo del vallenato, grabó y cantó lo que quiso, cantaba en parranda la música de Calixto, de quien pensaba se iría primero que Diomedes, la vida quiso que fuera al revés.
Una gran cualidad para componer, para interpreta y sorprender a su fanaticada en cada presentación cuando estuvo en condiciones físicas, luego su ritmo de vida le cobro sus excesos.
Tampoco se podrán olvidar sus frases celebres, esas que nos regalaba con jocosidad y que hacen que para mi sea el filosofo del vallenato, porque decía cosas profundas en medio de sus locuras, tal como lo decía el mismo, borracho indio....

En los últimos años quedaba poco del artista aplomado en tarimas, siempre llegaba borracho, siempre tarareando las canciones, en las ultimas presentaciones cantaba sentado en una silla, síntomas inequívocos de que el final estaba cerca, pero aun así pudo mas las malas compañías, estar mal asesorado, eso que lo llevo a la tumba, a la que tanto le huía pero que al final no pudo esquivar y que lo sorprendió mientras dormía un domingo 22 de Diciembre, de ahí en adelante que mas decir del mas grande, nos dejo un tremendo trabajo discográfico que sigue siendo éxito un año después. Nos dejó una historia musical exquisita en la que cualquier canción que suene se escucha con un sabor innato vallenato y muy de Diomedes.

Gracias Diomedes, gracias por darle tanto a la música vallenata, seguro que esto quedará por siempre, tanto así que hay mucho loco que lo imita y que busca la forma de parecerse al gran Diomedes Diaz. De seguro estarás con Juancho Rois, haciendo el folclor mas grande y haciendo disfrutar en la eternidad a tus seguidores.



No hay comentarios.:

Periodismo activista

"El periodismo es la materia prima de la vida en sociedad, hoy más que nunca el periodismo serio es una receta médica para la sociedad&...