Bonilla

Los bodegueros de Petro están en un proceso de defensa encarnizado de su ministro de Hacienda Ricardo Bonilla, por menos de lo que hoy mencionan a Bonilla, esos mismos bodegueros pidieron la salida del entonces ministro de hacienda de Iván Duque, el famoso ministro Carrasquilla, el mismo que no sabía cuándo costaba un cartón de huevos.

En esa época de Duque, el senador Petro y su recua de seguidores pedían la cabeza del entonces ministro, hoy, ese mismo Petro, pero convertido en presidente defiende como gato boca arriba la honorabilidad de su ministro y amigo Bonilla. La acusación de la fiscalía, que está en manos de una fiscal de Petro, es muy dura contra dos piezas del gobierno del cambio, Olmedo López y Sneyder Pinilla tramitaron coimas por más de 5340 millones de pesos. En la acusación hacia estos dos buenos muchachos petristas, se menciona gente del círculo más cercano de Petro, Carlos Ramon González, dueño del llamado partido verde que se quedó verde y maduro como lo hacen los partidos tradicionales, con contratos y a punta de puestos, para eso querían llegar al poder, olvidaron en este partido lo que les enseñó Mockus. También se menciona a la otra verde, Sandra Ortiz quien tramito dineros para el entonces presidente del congreso Iván Name, y aunque Petro diga que Name era opositor de su gobierno, los rastros del dinero parecen ir en la dirección de Name desde el gobierno.

Según Bonilla, jefe de la cartera de Hacienda, "preguntar por un trámite no es 'direccionar', ejecutar un presupuesto no es entregar plata, reunirse para revisar una agenda oficial no es concertar irregularidades, y recibir congresistas en demanda de soluciones para sus regiones no es comprar votos". Pero a Andrés Felipe Arias, conocido como Uribito, los que hoy gobiernan lo incineraron públicamente por menos o lo mismo. Muy extraño todo, que un ministro se apersone y pregunte por proyectos multimillonarios en regiones olvidadas en épocas que no había ningún tipo de desastre o plan de mitigación.

La Fiscalía también dijo que la entrega del dinero a los expresidentes del Senado y la Cámara contó con instrucciones del actual jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia, el señor Carlos Ramon González, un verde maduro como el de Venezuela.  “Usted, señor Olmedo, coordinó con Ricardo Bonilla González, ministro de Hacienda; María Alejandra Benavides, asesora del ministro, y Sneyder Pinilla, el direccionamiento de contratos para los municipios de Cotorro, Córdoba, Saravena, Arauca y Carmen de Bolívar, Bolívar, en los cuales estaban interesados indebidamente los senadores y representantes”, señaló la Fiscalía.

En este gobierno se olmedearon más de 400 mil millones en las narices de Petro, personajes de su entera confianza, buenos muchachos, y a través de ellos direccionaron más de 5 mil millones de pesos en coimas para congresistas, con contratistas de la UNGRD que han trabajado con los de antes y lo hacen con los de ahora, como hemos dicho siempre, todo cambia para seguir igual, todo cambia para que no cambie. Hoy la realidad es que este gobierno tiene altos funcionarios señalados en escándalos de corrupción, entre esos Bonilla, y Petro no hará nada, porque él dice que con pedir perdón es suficiente, aunque parezca que para mover a los congresistas que aprobaron sus reformas en el congreso gracias a esas supuestas coimas ya salió a luz pública. Mientras todo esto pasa, Petro estará de vacaciones paseando y bebiendo en Paris.