El mismo ratón peinado para el otro lado

Las chuzadas han retornado al país dice el fiscal Uribista y amigo de Iván Duque, aclarando con esto el señor Barbosa que, en épocas anteriores, sobre todo en la de su amigo Álvaro Uribe se chuzaba a todos. Uribe utilizó al DAS para chuzar a periodistas, opositores y a la corte suprema de justicia. En esos años de pelea de Uribe con la prensa, en la que muchos periodistas debieron irse del país, existió abuso de poder, solo que en esa época todos los organismos de control eran controlados por Uribe. Pensábamos que con el cambio eso quedaba atrás, sin embargo, este gobierno da mucha papaya y se pone en la palestra pública con la misma porquería que hacían los de antes.

 Chuzadas, abuso de poder, Chantajes, Dinero en cantidades, son detallitos que pueden no ser mortales para un gobierno, pero que en esta novela llamada Colombia sirven para avivar la llama de la oposición que no hay. Un gobierno que se hacía llamar del cambio y termina aliado con la escoria que dejaron los otros partidos, personajes políticos con mucho poder que lo llevaron a la presidencia. Aparecen pruebas de que este gobierno, o la mano derecha del presidente chuzaba a la exniñera por el robo de un dinero, no sabemos a ciencia cierta la cantidad de dinero que le robaron, la mano derecha de Petro habla de 7000 dólares y su ex mentor, Armando Benedetti habla de 150 millones de pesos, y dice que Sarabia chuzaba a la empleada doméstica en su beneficio para saber qué pasó con su plata.

 En el gobierno de Álvaro Uribe se chuzaban periodistas, congresistas, magistrados, y todo aquel que oliera a oposición. Uribe decía que él quería chuzar el corazón de los colombianos, pero utilizaba el DAS para escuchar lo que sus enemigos políticos hablaban de él, al preguntarle a un uribista de la época, decía; Para eso es el poder. En ese gobierno, Sabas Pretelt y Diego Palacios dieron puestos y notarias. Usaban mermelada para pasar proyectos como todos los que llegan al poder, aceitaba maquinarias el gobierno de Uribe y usaba todo el aparato estatal para enriquecer a sus hijos, haciendo creer al país que vender manillas da plata.

 Hoy, en el llamado gobierno del cambio, suceden cosas parecidas, al menos los escándalos que leemos a diario y que son generados solo por miembros del gobierno Petro, lo tienen en el punto de mira, el hecho de que existan abusos de poder como los que hacía Uribe, esta vez con su mano derecha quien usaba el aparato estatal para indagar por un robo en su casa, que se tuviera chuzado el celular de la empleada doméstica de esta señora dice que seguimos en las épocas de Uribe. Y así lo reconocen uribistas como María Fernanda Cabal y el Fiscal Barbosa, enemigo acérrimo de Petro y al cual Petro no ha sabido torear. Solo le da todos los días motivos para que el ególatra Barbosa suba su popularidad.

 Colombia sigue gobernado por el mismo ratón solo que este tiene el peinado para el otro lado. Nada ha cambiado y todo sigue igual, no puedes hablar de cambio teniendo a las escorias de otros partidos a tu lado, o usar a esos partidos tradicionales que eran Uribistas y de los cuales Petro renegó tanto a su lado para garantizar gobernabilidad. Eso no es el cambio, pero los Petristas no están preparados para esa conversación y los uribistas solo callan y miran el televisor con palomitas de maíz, viendo como todos los días este ratón hace lo mismo que el ratón anterior.