La lealtad e incompetencia por encima de los meritos

Cuando uno escucha hablar personajes como Patricia Caicedo ante el concejo de Santa Marta, tratando de defender su pobre gestión ante el ESSMAR, es cuando uno como ciudadano del común, de a pie, termina de entender porque la ciudad esta como esta. Prima en la fuerza de Caicedo la lealtad para colocar a estos personajes a gerenciar, por eso se asegura de que ellos sean los perritos más fieles que pueda tener un amo, personas sin la capacidad de discernir que jamás le contradigan al amo y señor del palacio naranja. Prima la lealtad e incompetencia por encima de los méritos.

El que intente decir algo distinto no tiene cabida, el que no se ponga la camiseta para marchar no tiene cabida, el que no re tuitee no tiene cabida, el que no monte en sus redes sociales los mensajes que comparten desde el WhatsApp no tiene cabida. No tiene forma de estar en la nómina, y en una ciudad con altas cifras de desempleo, desconectada del mundo empresarial y sobreviviendo de la informalidad, es difícil que alguno intente irse en contra del patrón, el que lo hace sabe que no tiene cabida en la nómina y no se le renueva contrato, por eso es importante su lealtad con la camiseta color naranja para marchar, para llevar a protestar en contra del concejo de la ciudad cuando intente hacer el control a una funcionaria con total incompetencia que lo dice en sus cifras; no es capaz de gestionar la cartera de una empresa como el ESSMAR, pero que en poco menos de 6 años paso de unos costos de operación de 20 mil millones a tener como costos la suma de 45 mil millones de pesos al año, y eso ya dice mucho de una empresa que ahora es pública y se supone debería ser más austera.

Los gobiernos de Caicedo han comenzado con personas técnicas, conocedoras de los temas de ciudad, personas con méritos y en los cuales el dueño del circo naranja ha puesto su confianza, sabe que se requiere gente con méritos, pero siempre estas personas terminan renunciando y apartándose del mesías del magdalena, difícilmente un gabinete de Caicedo o de sus pupilos dura más de 3 meses igual, y eso es porque la gente que sabe de los temas no se aguanta su estilo de gobierno, un estilo totalmente narcisista que prefiere la lealtad y la incompetencia ante la meritocracia.

El mérito de estar en la fuerza siempre será apoyar en las marchas, el andamiaje está muy bien estructurado que les piden fotos y pantallazos de sus estados para saber que están con la causa, así sean muy bueno en lo que hacen sino demuestran el compromiso requerido en hacer que el movimiento crezca, en marchar y en defender a muerte al patrón, difícilmente estarán con él en el nuevo paraíso que se han construido los amigos del cambio.

Patricia Caicedo, hermana del dueño del circo. Es según muchos la elegida para continuar el legado de la fuerza popular en Santa Marta, dicen que será la ungida para ser la alcaldesa en el 2024. De política debe tener algo, de gerente no tiene nada.  Toda la respuesta a la crisis sanitaria de la ciudad la resume Caicedo en echarle el agua sucia que hoy se rebosa por su incompetencia; a METROAGUA y a los de antes, la señora Caicedo asegura que la crisis de rebosamiento de aguas de alcantarilla que se vivió el fin de semana en El Rodadero es, supuestamente, culpa de los restaurantes del sector que no tienen trampas de grasas. Y la mierda que rebosa en Bellavista y en la Bahía dice que es saboteo. Que más saboteo que el que se hacen ellos mismos con tanta incompetencia.

Leales es llegar en caravana a acompañar a la gerente del ESSMAR en una defensa que al verla da mucha pena ajena, buscan la mejor forma de tapar todo el desastre que han armado, una empresa en quiebra, con una cartera in gestionable y que sigue por menos de lo que era hace 6 años cuando a su hermano se le metió la idea de acabar con la empresa del momento. Leales como los lideres comunales de barrios empobrecidos que defienden la gestión de Caicedo por todo lo que desde la alcaldia les dan, incluyendo puestos.