Cuando renunció Néstor Humberto Martínez como
fiscal general de la nación, pensámos que no podíamos tener un peor
personaje en el puesto. Un tipo como Néstor Humberto que ha lamido y relamido
el poder en todas sus esferas en un país manejado por los mismos de siempre,
era suficiente. Sin embargo como dice el viejo refrán o adagio, todo puede
salir peor, y luego de Néstor Humberto apareció el señor Francisco Barbosa, un tipo cuyo
gran mérito es ser el mejor amigo del subpresidente, y así con esa borrachera
de poder, se atreve a decir que ostenta el segundo cargo más importante del país.
Uribe sabía que debía recobrar el poder para poder hacer lo que le viniera en gana, a los caudillos como él les importa cinco las instituciones del país, nos ha llevado personajes como el bachiller Macías a ser presidente el congreso, María Fernanda Cabal como Senadora, el primo de Pablo Escobar fue su mejor asesor en sus dos periodos presidenciales, el buen muchacho Noguera estuvo de director del órgano de inteligencia más importante del país y lo llevó al cierre cuando se descubre que lo tenía trabajando en favor de los paramilitares.
Épocas de Uribe en el poder son sinónimo de
oscuridad, de falsos positivos, de más impuestos para los pobres y sobre todo
de cero institucionalidad, son el reflejo de su ambición de poder desbordada
por querer tapar todas las porquerías que hizo en su momento cuando era
considerado por muchos como el salvador.
Producto de esa falta de consideración con el país, es que llevan personajes como Barbosa a la fiscalía, un tipo que se cree el más inteligente de Colombia, para su autoestima no hay límites, se autodenomina el mejor amigo del subpresidente, y con ese merito el subpresi lo terna para que la corte suprema en medio de una terna insulsa escoja al menos conocido, el que termina siendo el más peligroso. Una fiscalia condescendiente con el delito si es de un uribista, así como avisan que van a allanar la sede del mal llamado centro democrático.
Barbosa, un tipo que se puede catalogar como perseguidor de los opositores, a la alcaldesa de Bogotá le abre investigación por estar en Carulla con su pareja, a Petro lo menciona como parte de la ñeñe política, a Caicedo en Santa Marta le saca comunicado de extinción de dominio, y todo aquel que no sea Uribista es víctima irremediable de su borrachera de poder. La misma que le da para irse de puente con su otro gran amigo, el contralor, quienes en un intercambio de pareja tienen de subalternas las esposas, y así es más fácil viajar en familia y con amigos, de paso se lleva a la hija y a la mejora amiga de la hija en el avión de la policía, justo cuando está prohibido ir de paseo por Colombia de acuerdo al mal llamado asilamiento social obligatorio del subpresi, quizás sea legal pero no moral.
Como dice el dicho, tras de cotudo y con paperas, el fiscal se enoja cuando le recriminan porque el si puede pasar por encima de la ley, y su respuesta es de un digno seguidor del presidente eterno de Duque, antes que fiscal es padre, olvidando los compromisos que tiene con el pais, es la mejor forma de solucionar problemas, colocar a los niños como carne de cañon, ya lo hizo el subpresi cuando bombardearon sin misericordia a unos niños que la guerrilla tenia reclutados.
Estos personajes Uribistas puros y crudos, son los que creen que están por encima de la ley. No hay peligro más grande que un bobo y un loco con poder, en este caso tenemos un personaje nefasto a todas luces, que está en el que él considera el segundo cargo más importante del país para continuar con esa loable labor de salvar a la patria, esa que es encomendada por el presidente eterno de Duque.
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