En esta época de pandemia y crisis
mundial, muchos niños que nacen están siendo bautizados por sus padres con
nombres exóticos, extraños y un poco salidos de los cabales (No de maría
Fernanda Cabal), es así como ya vemos que existen. Covid de Jesús, Covid Alejandro,
Covid Marie, Mary Pandemia, Ana Wuhan y nuestro país no podía escapar al
nacimiento de un niño que parece haber encontrado su rumbo después de más de 20
meses en la casa de Nariño, y claro no podría ser otro que el subpresidente de
Colombia, a partir de esta crisis convertido en Iván Pandemia.
La imagen de Iván se ha
aumentado con todos los medios posibles, diariamente lo vemos agotado con su
chaquetica de prom y la botellita color naranja con gel antibacterial. El tipo
aprovecha sus dotes de títere y manejado por hilos transparentes del poder real
de este país.
Si a Santos los Uribistas lo
graduaron y tildaron de Farsante, de volteado, a Iván lo podemos denominar un
Subpresidente, un títere que hace lo que su presidente eterno le diga, entendemos
que el tipo se ganó la presidencia en una bolsa de platanitos cuando su
presidente le robo la bolsa de platanitos en el congreso.
Esos mismos Uribistas apodaron
a Juan Manuel Santos como FarcSantos porque su política de gobierno y que dejó
un gran legado en este país fue el fin del conflicto, acabar la guerra con la
guerrilla de las FARC para ponerle fin a más de 50 años de muertos entre
colombianos, política que derivo en el acuerdo de paz que los Uribistas
lucharon por acabar y desprestigiaron para ganar con mentiras el plebiscito
innecesario que Santos se inventó y con el cual revivió a Uribe y sus fanáticos.
Hoy, vemos que después de 20
meses de gobierno del subpresidente por fin parece haber encontrado una política
de gobierno, un rumbo que no tenía, al fin, llegaron a la presidencia con
mentiras y con la consigna de que no fuéramos Venezuela, pero que seguiríamos
siendo Colombia, el país más corrupto del mundo según los últimos estudios
realizado por Transparencia Internacional y revelados por U.S News. Uribe
y sus amigos en el poder saben para que se utiliza, por eso lograron ubicar a Iván
como Subpresidente, una imagen joven que no revela nada nuevo y diferente a lo
mismo que han hecho los últimos gobiernos de Colombia. Esos mismos que son capaces de hablar pestes del proceso de paz y sacar mas de 3500 millones de pesos para mejorar la imagen de Iván, y son capaces de renovar la flota de camionetas de seguridad por 9000 millones para que Iván transite mas seguro al igual que su presidente eterno, en épocas de pandemia. Todo permitido porque su imagen ha mejorado con tanto meme que produce.
Por fin el subpresidente encontró
un motivo para gobernar, encontró en la enfermedad y el virus su oportunidad de
figurar, y de ahí que su imagen bastante caída empezara a repuntar, y quien no,
con una hora diaria de televisión para decir lo que le dé la gana sin nadie que
le refute todo lo que habla, regalando plata a los colombianos en medio de una
tragedia, es más fácil gobernar con el miedo de la gente a morir, sin congreso legislando y sacando decretos a diestra y siniestra de acuerdo al acomodo de quienes le dan ordenes, obviamente ya
tiene su alias como el que le endilgaron al nobel de la paz, en esta caso ser Iván Pandemia un nombre acorde a los que hoy los padres
le colocan a sus hijos, será el
subpresidente que encontró en la enfermedad un motivo para estar en la casa de
Nariño, el único motivo que le pudo ayudar a levantar una imagen tan deplorada hasta por los que lo eligieron por no ser Venezuela.
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