El recibo de energía de la costa atlántica es uno de los más costosos de este país, la tarifa del kilovatio/hora que A-ire nos cobra es de $915, una tarifa aprobada por la CREG y avalada por el congreso cuando el gordito Iván Duque era el presidente, con un congreso que tenía en la oposición al hoy presidente Gustavo Petro. Petro quien decía en esa época que nos robaban de frente y que él podía cambiar esas formas de cobro que tiene la energía.
Cuando Duque fue presidente, o mejor dicho estuvo en la presidencia avalo la
compra de Electricaribe por parte del grupo del señor Ríos y les entregaron una
empresa limpiecita en deudas, con la ñapa de recolectar la cartera morosa que tenía
Electricaribe. Adicionalmente, de la mano del congreso uribista en esa época, le
aprobaro un plan para que la tarifa de energía fuera la más costosa del país, todo en las narices del pueblo y apoyado por quienes dicen defenderlo.
Hoy Petro es el presidente del país,
y la tarifa sigue aumentando y nada que decrece como es su palabra favorita.
Entre tantos problemas de este gobierno, con escándalos familiares, políticos y
con sus terribles reformas, podemos hablar de promesas incumplidas, y como todo
aquel que es oposición cuando llega al gobierno termina siendo más de lo mismo,
es que cuando están del otro lado tienen solución a todos los problemas, pero
cuando tienen el poder son incapaces de cambiar el sistema para favorecer al
pueblo, lo que buscan siempre es cambiar el sistema para sus intereses, como es
el caso de la reforma a la salud, en la que piensan que es mejor volver público
el sistema de salud como funciona en Cuba o Venezuela.
En cuanto a la reforma a la
salud, no puede ser que todos los técnicos y comités de salud estén equivocados
y sea Petro el que tenga la razón, no puede ser que volvamos a una época en la
que la salud sea manejada por los políticos, imagínese esa cantidad de dinero
manejada por personajes como Caicedo en el Magdalena y Pinturita Quintero en Medellín...
Se frotan las manos los amigues y progresistas, saben que es un ciclo o péndulo y hoy gozan del poder, toca asegurarse.
Muchos colombianos que votaron
por Petro se encuentran furiosos por la oportunidad perdida que estamos
teniendo. No puede ser que un señor como Petro al estilo de los dictadores se
imponga a la brava en contra de la voluntad y los criterios técnicos que muchos
sectores le han señalado. Petro y su corte quieren consenso para pasar
sus proyectos, pero no para debatirlos. Somos lo mismo de antes, con cuotas burocráticas
a los partidos tratan de obtener los votos que no tienen. Gilberto Rondón un excongresista
liberal es quien maneja el FNA y ahí están feriando puestos con los
congresistas rebeldes, son las mismas prácticas, es lo mismo de siempre. Es la
misma tarifa de energía que cuando son oposición critican, pero cuando llegan
al poder disfrutan.
Colombia está hoy frente a lo
que parece ser una oportunidad perdida, justo cuando el país se levantó y quiso
cambiar cayó en manos de un ególatra como Petro, que se alió con los de antes
que tanto criticaba para hablar de un cambio que hoy no fue. El cambio es para
mantener poder y generar más burocracia como lo hacen con el llamado Ministerio
de la igualdad, al frente de la señora del helicóptero, la empobrecida que nos
manda a decir de malas y pueden llorar.
Petro dice que con decretos piensa reformar las tarifas, por ahora será una tarifa de $915. La costa pagando los servicios mas caros del país.
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