Nunca
en Colombia había gobernado la izquierda, siempre habíamos tenido gobiernos que
imponían la ley de ellos a como diera lugar, usando los métodos tradicionales
de la política, con mermelada, chantajes, abuso de poder y sobre todo con el
discurso de atacar a las guerrillas. Todo hasta que las FARC se desmovilizaron
y se acabó el discurso guerrerista. Apareció la oposición entre los mismos,
cuando el centro democrático se fue en contra de Santos con toda, y se fue
encima pensando en todo lo que sus antiguos aliados en el lado oscuro llamado
paramilitarismo podían contar en la JEP.
Hicieron 4 años de dura y férrea
oposición con mentiras, hasta llevar a la casa de Nariño a un personaje que jamás
hubiese sido personero del colegio. Apareció entonces la misma oposición
mentirosa, pero esta vez de la izquierda hacia la derecha del centro democrático.
Petro lo anunció el día que perdió las elecciones con el aprendiz Iván Duque,
nunca estuvo tan cerca de ser presidente hasta ese día, pero aquella vez tenía
un oponente aplomado y no un loco que no quiso ganarle 4 años después, cuando
Petro volvió a llegar a segunda vuelta, y pensamos muchos que perdería, pero el
viejito Hernández hizo todo lo que estuvo a su alcance para perder.
Cuando Duque era presidente, le
criticaban los viajes que hacía por el mundo, el vestido de fomi de su esposa María
Juliana, criticaron desde la izquierda cuando a la misma María Juliana una
oficial de la policía le sostenía la sombrilla en plena posesión de Duque, a
Martuchis se le criticaba que viajara mucho, e incluso que Duque usara el avión
presidencial para irse de paseo con sus hijos un fin de semana a Panaca.
Estamos de acuerdo, es abuso de poder. Hoy en el poder esa oposición que
criticaba todo lo anterior hace lo mismo, Petro y la Señora Márquez se la pasan
en el avión presidencial con comitivas suntuosas, dice Francia Márquez que ella
está volviendo donde sus ancestros y que por si acaso pueden llorar y de malas,
que no está haciendo nada malo, que tener un helicóptero para irse los fines de
semana a visitar a su mamá es derecho que tiene gracias a ser la segunda de
Petro en la boleta presidencial. Y claro desde la oposición que hoy es el mal
llamado centro democrático deben decirle que no está bien viajar. Es un país en
la mitad de dos extremos muy malos, de dos pecuecas llamadas Petro y Uribe. Un país
que ya visiona reemplazos de estos personajes, en personajillos como Pinturita
Quintero, quien se ha radicalizado en Medellín o de Carlos Caicedo, que lleva
12 años de poder en el Magdalena con el cuento de los de antes, sin mencionar
que los de antes ya es él y su grupo naranja.
Caicedo criticaba en la
posesión de Duque que a María Juliana una oficial de la policía le sostuviera
un paraguas, en estos días de correrías por el departamento en los que anda
inaugurando obras que no se han hecho, hace lo mismo, al bajarse de una
camioneta una secretaria le sostiene su sombrilla, cual emperador que se cree.
Siempre lo hemos dicho, es típico de la izquierda criticar lo que tanto
anhelan. Ven en otros la forma de progresar y hacerse ricos con el estado, por
eso aman que todo se maneje desde el estado y no privado.
Hoy tienen la oposición que se merecen, en un país jodido por ambos
lados, dominado por odios y rencores, por paramilitares en su momento y por la
izquierda hoy. Aparecen entones los Bobo Polo y las María Fernanda Cabal,
retorciendo con mensajes insultantes al gobierno y buscando que los colombianos
sigan pensando con el hígado antes que con la razón.
Perlas:
- Parece que le llegó la hora al emperador naranja, despues de tantas dilaciones hoy se define su suerte y tiene muchas opciones de ir preso por todo lo que ha hecho y todo lo que se le acusa. Aunque ya sabemos la tactica del señor dueño del circo naranja, victimizarse y atacar al fiscal, a los de antes. Olvidando que los de antes son el y su grupo que son los de ahora.
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