Vive en estos momentos Iván Duque un
cuarto de hora dulce y toma un respiro en sus 16 meses de gobierno, por un lado
el congreso le aprobó la reforma tributaria a su medida, hecha para beneficiar
a quienes le ayudaron a llegar a la presidencia, y por otro lado cosecha la
siembra del gobierno anterior.
Obras son amores, y eso lo
entendió muy bien Duque, justo cuando más del 70% del país desaprueba la forma
de gobernar del impuesto por Uribe, aparece un bálsamo con las obras que inicio
y no terminó el gobierno de Santos. Duque en medio de todo entiende que
inaugurando y haciendo alianzas con los que antes eran enemigos puede salir a
flote de esa inundación en la que está.
Ya hizo alianzas con German
Vargas y su cambio radical, es parte de la cereza al pastel, a mí que no me
vengan con el cuento que no hubo mermelada, esa que tanto critico a Santos, la
misma que le permitió al gobierno anterior gobernabilidad y que no tiene Duque,
sin embargo Duque recibió el permiso de su presidente eterno para hablar con German
y arreglar el chico, parte de esos acuerdo fue el apoyo con el que lograron
aprobar en la madrugada del viernes la reforma para recaudar según Duque más, y
que en pocos años será menos.
Santos inició una
transformación sin precedentes en el país, una revolución en infraestructura,
le encomendó la labor a German que sabe que entregar cemento es recordación en
el pueblo. Así de esa forma comenzaron a construir y regalar casas, hicieron
puentes y carreteras, muchos entregados por Santos y otros tantos en fila para
entregar por Duque.
Duque llegó a Barranquilla este
20 de Diciembre a entregar el puente Pumarejo, puente que se retrasó en su
ejecución por más de un año, su final estaba previsto para Mayo de 2018 y no
lograron concluirlo. De eso se aprovecharon los Uribistas, de esa fiesta en la
que creen que las obras son suyas y no del pueblo. Queda en fila el puente de Magangué,
el que comunicara a Mompox con Sincelejo y el interior del país, Santos
inauguro el puente y le faltaron las vías de acceso, esas que Duque prometió
entregar el 31 de Marzo, quizás ese día devele una nueva placa con su nombre y
el de la tía martuchis, diciendo que terminaron lo que Santos comenzó y no
entregó.
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