miércoles, febrero 07, 2018

Un cuento: Que bonita vecindad

Cuentan los de antes que todo tiempo pasado fue mejor, eran épocas más sanas y limpias en todos los aspectos, eran épocas de cultura y de respeto. Donde se vivía de acuerdo a la urbanidad de Carreño que se impartía en las escuelas. Épocas en las que el respeto primaba, en las que las buenas costumbres eran obligatorias desde casa hasta la escuela. Fruto de ello, y de esas épocas nuestro país contaba con grandes literatos, llegó a ganar un premio Nobel con la mente más brillante que ha parido este país, por encima y de lejos del gran colombiano de History Channel.

Eso valores que antes se tenían como el respeto a los mayores, la decencia, entre otros han sido reemplazados por la violencia que consume a una sociedad que rechaza la palabra paz, que dice paz si pero no así, y de ahí en adelante todos los ciudadanos que siguen la corriente del miedo y que corren despavoridos ante el miedo que les produce que una persona diferente a los de siempre llegue a gobernar, inciten a mas odio y violencia, sin entender que se debe pasar la página de la guerra, la página del conflicto armado con una guerrilla que hoy no es más guerrilla, sino que se convirtió en partido político para que todos los acabemos con los votos, ahí es donde debemos expresarnos como verdaderamente ciudadanos.

Hay un cuento de televisión que lo repiten mucho en el canal RCN,  que existía un personaje capaz de unir en las diferencias que tenían Don ramón y doña Florinda, que hacía que el señor Barriga siempre sufriera un golpe cuando llegaba a cobrar la renta,  enseñaba la humildad y nobleza de un niño, transmitiendo verdaderos valores a las personas que fueron creciendo observando al chavo, pero sobre todo acompañado del verdadero respeto que los padres le inculcaban a los hijos hacia los mayores; de aquello a lo que vivimos hoy día, poco o nada. 

Hoy se ven noticias tan aberrantes de personas que sin pudor alguno violan a una mujer de 26 años delante su hija de 7, y que también quisieron acceder carnalmente a la niña, se ven personajes macabros y enfermos como Rafael Uribe Noguera, quien secuestra, viola, asesina y limpia la escena del crimen. La vecindad de hoy es en la que el vecino quiere ser más vivo que el otro, en la que roban energía sin pudor, en la que la envidia los consume como decía Diomedes, sabiendo que la envidia es un mal sobre la tierra, y que lo mejor es tener paciencia con tantos envidiosos. Personas que crecen con el resentimiento social de no soportar que los que alguna vez tuvieron un estilo de vida similar, hoy están mejor económicamente.

Pero que podemos esperar si todo cambia, todo evoluciona; La musa de la inspiración de los que hacían música antes, era la mujer, los paisajes y algo más del ser humano, hoy día la poesía urbana como la llamó el gobernador de Antioquia es la que pregona Maluma, en donde es mejor ser felices los cuatro y con sus ritmos pegajosos van inculcando en la sociedad los valores modernos, esos que pueden resultar muy liberales y que dan cuenta de los embarazos adolescentes, y de la falta de principios morales con los que vive una sociedad moderna pero conservadora como la nuestra, una sociedad de la doble moral, en la que la vecina que reza y asiste a su iglesia evangélica es la que daña los balones de los niños que practican deporte, en la que esa misma señora tiene el aire acondicionado encendido todo el día pero el recibo de energía que le llega es el más barato de la vecindad, esa sociedad en la que el "Malparidito" y no hay otra palabra para definirlo mejor, dándoselas de chachito de barrio intenta agredir a personas mayores, haciendo lo que venga en gana con el apoyo de sus padres, no entendiendo que el mundo es compartido y que las reglas y leyes son para respetarlas, porque de tanto que hemos vivido en violencia a los Colombianos nos quedó gustando. 

O sino como explicar que el día que más muertes violentas se dan es el día de las madres, o entender que el 55% de los victimarios conocían a sus víctimas. Porque la violencia no era solo con las FARC, ese era el problema que nos vendían para dárselas de salvadores mientras se llenaban los bolsillos de dinero, el verdadero problema sin lugar a dudas radica en la educación de un país que no lee y no hace análisis de la situación, o en el que los padres no enseñan a respetar, todo parece un cuento, pero no, es la bonita vecindad.



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