domingo, noviembre 25, 2012

Ser soberanos

El pasado lunes cuando se escuchaba el fallo de la corte internacional de justicia de La Haya, y de a poco se conocía la noticia de que Colombia perdía una porción de territorio, muchas personas empezaron a hablar de lo que poco conocen, y es que un país como el nuestro que pese a estar en suramerica y que tenia hasta ese día fronteras con 6 países de Centroamérica es bastante extraño de comprender, pero mas que si fuese extraño era algo que realmente debíamos poder mantener, nuestra soberanía nunca debió estar en tela de juicio y es ahí precisamente donde debemos buscar el origen de todo este dolor de patria que a muchos nos puede embargar el día de hoy, y es que desde 1903 cuando Colombia perdió Panamá, no se había dado un golpe tan certero a nuestra soberanía nacional.
En el año 2001 cuando Nicaragua presento la denuncia en La Haya, año en el tal vez nuestro país vivía un momento interno difícil;  la guerrilla de las FARC tenia a toda la población acorralada, al gobierno en su peor momento y el presidente de turno Pastrana no hizo nada por evitar poner en tela de juicio algo que nunca debió dudarse, que Colombia era dueña de San Andres y todos los cayos que lo rodean inclutendo los limites marítimos, que ese 19 de Noviembre modifico absurdamente la CIJ.
Colombia tuvo mas de 10 años para decir que no se debía juzgar algo que ya estaba acordado, y menos con los antecedentes de una corte que a todas luces siempre trata de quedar bien con todos, aunque en este caso se le fue la mano con Nicaragua, paso un gobierno de ultraderecha como lo fue el del guerrerista Alvaro Uribe, quien nunca recordó San Andres porque estuvo ocupado en el conflicto interno que vive nuestro país, y que como buen Uribista que es, se acordó que los fallos que no le convienen no se deben cumplir, groso error, la justicia es una sola y pueda que no nos guste, pero el error de nuestro pais o mejor dicho de los demasiado diplomáticos dirigentes nuestros, fue precisamente dejarse montar un caso por un loco, un caso que nunca debió existir y que des afortunadamente al día de hoy, nos dejo con unos morros de piedra en aguas de Nicaragua, tierra que no sirve sino para que las aves reposen en ellos, porque son inhóspitos e inhabitables, pero que adicionalmente nos quita fronteras con países de centroamerica y nos deja como el hazme reir de la región, por dejarnos quitar de un loco un pedazo de mar, que siempre fue de Colombia pero que nuestros dirigentes nunca entendieron que ser soberanos es ejercer soberanía a través de inversión social, educación,  oportunidades, salud de calidad y sobre todo enseñarles a amar a Colombia y a sentirse realmente colombianos.
Seguro que muchos pensaran que la salida mas facil es no acatar un fallo, asi como Uribe magno expresidente de Colombia lo menciona cada vez que no le conviene lo que la justicia dicta, seguro que no, Colombia tuvo en sus manos y sobre todo en el gobierno de este señor la oportunidad de no dudar de nuestra soberanía  debió entender en el año 2007 cuando hablaba con el loco Ortega que ser soberanos no es dudar de que lo nuestro no se rifa ni se litiga, lo nuestro se respeta se quiere y se cultiva.



1 comentario:

Edd dijo...

Pues si, ya ni modo. Y lo peor que puede hacer Colombia es no acatar el fallo. El daño es mayor en el orgullo que en la realidad.

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